Todo el que me siga en twitter sabrá que últimamente hago pan en casa. De hecho soy un poco pesado compartiendo fotos de pan hecho en casa, como este que encabeza esta entrada.
La semilla de esta afición me vino hace más o menos un año. Nos encanta desayunar con tiempo pan, aceite y tomate (para mi el mejor desayuno posible) y cuando te gusta algo tanto lo normal es cambiar las materias primas. Tenemos cerca de casa una panadería buena así que fue fácil acostumbrarse a tomar panes algo especiales que distan mucho de las barras tradicionales o el pan de molde que venden en los supermercados.
He de decir que no como mucho pan. Es decir, en el día a día prácticamente nada. Pero los fines de semana, en el desayuno, es algo que no se puede dejar pasar. No como un acompañamiento sino como una comida en sí misma.
Estamos tan aficionados al pan que estuvimos planteándonos el verano pasado comprar una panificadora, pero nos echaba para atrás que los panes que salen son tirando a molde.
Menos mal que no la compramos porque mi mujer encontró el estupendo libro de Iban Yarza que es una maravilla (y un estupendo regalo de Reyes). Explica cómo hacer pan en casa, con los trucos y recetas necesarias, sin necesidad de cosas complicadas más que los ingredientes y un horno.
Yo recuerdo de pequeño haber hecho pan alguna vez y no quedaba muy bien. Normalmente sin mucho sabor y algo apelmazado. Después de leer este libro entiendo por qué. Hay unas cuantas claves para hacer un buen pan y no se suelen respetar en las recetas para niños.
- Es muy importante dejar tiempo de reposo. El pan es básicamente harina, agua y levadura, y hay que dejar fermentar. Con esto se logra que haya buenos sabores y que se hinche la masa para tener una buena miga. Las recetas de este libro duran 5-12 horas, casi todo el tiempo de reposo. El tiempo efectivo es menor, pero hay que planificarse un poco. Básicamente todas las recetas son mezclar ingredientes (minutos), dejar reposar (horas), amasar (minutos), dejar reposar (horas), dar forma (minutos), dejar reposar (horas), hornear (menos de una hora).
- Las masas que explican en algunas recetas son poco húmedas, te dicen que hay que echar harina hasta que no se te pegue a las manos. Mi experiencia con este libro es al revés, las masas son muy pegajosas. Y salen muy ricas.
- Cuando horneas al principio se requiere mucha humedad y mucha temperatura para que suba, hay que echar un vaso de agua en una bandeja debajo de la del pan. Después de 10 minutos hay que sacar la bandeja de agua y se baja algo el horno.