Ya que con el parto anterior no estuvimos nada contentos (no entro en detalles pero era más una fábrica de bebés que un sitio donde van personas a dar a luz) en esta ocasión buscamos un ginecólogo algo más humano. Dimos con Kamila Hallier, que tiene un centro estupendo en Madrid, el International Women's Health Center. Mi mujer ha escrito esto que quiero compartir por aquí:
Nunca tendremos suficientes palabras de agradecimiento para la Dra. Kamilla Hallier y su equipo por la increíble experiencia que hemos compartido gracias a ella con relación al embarazo y parto de nuestras hijas.
Después de una experiencia muy negativa en el embarazo de nuestro primer hijo, con un equipo médico diferente, estábamos buscando alguien con un enfoque menos intervencionista del proceso natural del parto, y así terminamos en el International Women’s Health Center de la Dra. Hallier. No podríamos haber llegado a un lugar mejor. Kamilla es una profesional increíblemente atenta y respetuosa. Tuvo en cuenta todas nuestras preocupaciones, sin importar lo insignificantes que parecieran. Nos guió durante todo el proceso del embarazo y parto de forma natural y relajada, pero sin olvidar todos los posibles riesgos y complicaciones que podrían haber surgido dado que estábamos esperando dos niñas gemelas, y a la vez garantizó que todo el proceso de embarazo y parto fuera tanto sano como seguro.
Además, tuvo en consideración problemas previos derivados del embarazo anterior, y se aseguró de que nos atendieran los mejores especialistas, como por ejemplo la fantástica fisioterapeuta Begoña Caldera y su equipo, Irene García, quienes se ocuparon de que tuviera la mejor preparación para el parto y posterior recuperación tras una diástasis anterior, así como su maravillosa matrona, Cristina Rodríguez, que nos dio todo el apoyo necesario y se esforzó al máximo para atender nuestras inseguridades y miedos con relación al parto y lactancia de gemelos. Incluso Anna, la asistente de Kamilla, es increíblemente agradable y comunicativa, haciendo que cada visita a la consulta sea un placer.
En resumen, Kamilla y su equipo nos han regalado la mejor experiencia que podríamos haber tenido, hasta el punto de que lo que finalmente fue una cesárea (por desgracia inevitable, debido a mi cesárea anterior) realmente la disfrutamos como el parto natural que nos hubiera gustado tener. Si alguna vez decidimos volver a tener un bebé, desde luego que nuestra única elección será de nuevo Kamilla Hallier y su equipo.