Soy muy de marca blanca. En general me interesa que los productos que compro tengan la calidad adecuada, es decir, no me gusta el lujo por el lujo pero tampoco quiero que la calidad sea tan baja que me incomode. Y en muchos ámbitos las marcas blancas me compensan: dan una buena calidad y el precio es más razonble que las marcas potentes.
Sin embargo había dos productos que hasta este año los consumía de marca: las cuchillas de afeitar y las gafas.
Las cuchillas de afeitar quizá fuera simplemente por disponibilidad. Gillete es onmipresente. Pero el coste de las cuchillas me parecía disparatado, la verdad. Y un día decidí mirar en Amazon y encontré unas muy similares y mucho más baratas. Y puedo decir que efectivamente la calidad es muy similar, ante una "cata ciega" no creo que se pudiera distinguir.
Otro tema es el de las gafas. Ahí no era por ser snob, simplemente porque básicamente en Europa hay un monopolio brutal, los márgenes son altísimos y normalmente hay que acercarse a una tienda, que realmente dan un buen servicio añadido. Si queréis saber más sobre el tema merece la pena escuchar el podcast de Itnig con Project Lobster, habla de este mercado y lo que están intentando hacer para romperlo.
Pero yo necesitaba gafas nuevas durante el confinamiento y decidí comprarlas por Internet, sin acercarme a una óptica. Tengo las dioptrías estables desde hace veinte años, sé qué modelos me quedan bien y quería probar. Lo intenté en Zenni, pero tenían restricciones y no enviaban a Europa. Así que me decanté por Tenda Glasses.
La experiencia fue excelente. Por 48 euros (y un par de semanas de espera) tuve unas gafas como las anteriores, que me costaron 200 euros. De calidad, cristal y todo comparable. Eso sí, no me quejaré de Vision Lab, a quienes he estado comprando gafas desde hace por lo menos 15 años ya que les escribí un correo para pedirles mi distancia intrapupilar (que no aparece en los papeles que me dan) y me lo dieron sin problemas.