Por ejemplo, en el primer bloque visitamos los monasterios de Yuso y Suso de San Millán de la Cogolla, donde se encontraron las primeras escrituras en castellano y euskera (las glosas, anotaciones al márgen de los libros en latín). Estas dos visitas son muy recomendables, me parecieron interesantísimas.
En el bloque de bodegas visitamos Laguardia, un pueblo bodeguero de Álava (pero que forma parte de la denominación de origen de vinos de La Rioja), en el que pudimos ver una bodega antigua. Y por fuera pudimos ver la bodega diseñada por Calatrava. En Elciego pudimos ver la que diseño
Pero la mejor visita fue la que hicimos a Bodega y Embutidos Tomás Amutio, tanto por la visita como por la sorpresa de después. La visita estuvo bien, nos estuvo justificando por qué en La Rioja tienen buenos vinos (principalmente porque el clima y las características de la tierra hacen que los vinos salgan buenos simplemente siguiendo el proceso natural sin necesidad de jugar con la química), nos estuvo enseñando su bodega familiar, su fábrica de embutidos, nos cebó a cenar y a beber vino por 3 euros y al final nos vendió un montón de vino y embutidos. Todo parecía guay hasta que se me ocurrió buscar su nombre en Google y entonces me encuentro con una historia bastante truculenta sobre su él. Hay bastantes detalles en múltiples periódicos online (primero se lee esto, luego esto y por último esto). Vamos, que estuvimos cenando con un delincuente.
En definitiva, un fin de semana muy completito. Ah, se me olvidaba, si pasáis por Logroño hay que tomar pinchos en la calle Laurel :)
Tags Technorati: La Rioja, viajar
2 comentarios:
Gloriosas las vieiras con... ¿pesto? Aún se me hace la boca agua de recordarlo...
Las vieiras, el vinito, la cena de Tomas,.....pero que fuerte lo de Tomás, yo alucinéee.
Publicar un comentario